Desde La Colaga os damos un consejo de Salud.
A veces hay caballos a los que la cincha les produce rozaduras en la zona de la cinchera, a la altura de su codo. Este problema se suele dar con más frecuencia en aquellos caballos con dorso corto o que son barrigones, de forma que su morfología ayuda a impedir a la cincha que se mantenga en su sitio y, en cambio, se queda demasiado adelantada, pellizcando la piel de esa zona y produciendo rozaduras o incluso heridas.
Para evitar este problema, no solo en caballos con esta morfológía sino a todos en general, una vez cinchados les cogeremos una a una las extremidades anteriores, es decir las manos, y tiraremos de ellas hacia delante, lo cual hará que no se queden pliegues de piel bajo la cincha.
Por otro lado es esencial que las cinchas estén en buenas condiciones de conservación y limpieza, ya que de otro modo contribuyen en buena manera a producir dichas heridas.